LA MEMORIA COMO REDENTORA DE LA HISTORIA

29.03.2024

El 24 de marzo tiene una significación que excede a lo que normalmente se trata, porque ese golpe de estado respondió al proyecto de EE. UU de transformar a América Latina en su patio trasero. 

Por Juan Alberto Rambaldo

Ese hecho que todo el mundo lo sintetiza en la acción contra los militantes de la lucha por la vida que sin lugar a dudas, fue muy importante pero excedía ese marco. La acción de eliminar a los militantes revolucionarios no era simplemente para limpiar ideológicamente a la Argentina, a Chile o Bolivia, sino,  instalar un proyecto de exclusión social y de concentración económica para el capital financiero internacional.

El golpe del 76 no solo fue un genocidio desde el punto de vista de la acción del estado terrorista, sino, que fue un golpe destinado a cambiar las relaciones de producción en Argentina transformándola en una estructura dependiente del capital financiero internacional, teniéndolo a Martínez de Hoz como su instrumento, "el Chicago Boys" representante de lo que en aquel momento fue la Comisión Triláteral que dirigía David Rockefeller.

Tenemos que ampliar nuestra visión de lo que es el 24 de marzo, porque querer concentrarlo en los 30.000 desaparecidos, es dejar a un lado otros muertos que hubo en esa lucha revolucionaria. Los 30.000 desaparecidos no eran unos perejiles, era gente que peleaba, que tenía una ideología y que quería un mundo distinto, siendo esto lo que trataron de destruir. Gestionaron destruir un modo de vida diferente e instalaron otro modo de vida dependiente, de exclusión social que dejo a millones de argentinos excluidos de las posibilidades de desarrollo y que sigue vigente hasta hoy.

En este momento, existe un alto grado de concentración de ese proyecto del año 76 y en consecuencia, estamos reavivándolo y llevándolo a su enésima potencia. Un proyecto que nunca dejó de existir y que siempre estuvo vigente desde ese momento hasta ahora.

Este 24 de marzo, se hicieron concentraciones en cada punto del país, pero hay que destacar la concentración que se hizo en Buenos Aires que fue impresionante ya que reunió a 400.000 personas, la más grande de la que se tenga conocimiento desde que se hace este acto recordatorio.

Me parece que además del repudio a la junta militar y del recuerdo a los desaparecidos, la manifestación tuvo que ver con lo que ha sido la conducta negacionista del gobierno de Milei. Para que tengamos una idea, el ministro de defensa Luis Petri se fotografió en el círculo militar con Cecilia Pando y con esposas de militares condenados por delitos de lesa humanidad, lo hizo en la presentación del libro Del Valle Larrabure en donde dijo:

"Algunos dirigentes demonizaron a las fuerzas armadas que actuaron en los 70"

Este encuentro se produjo antes del día de la Memoria, Verdad y Justicia, es decir que tenía un claro sentido de oposición a lo que fue la gran manifestación del 24 y fue contra los dichos de estos trogloditas que se manifestó la gente.

El discurso de odio que se esgrime en las voces del gobierno actual se está trasladando a acciones directas, volviéndolas represivas, como fue el caso de la vejación de una integrante de HIJOS a la que esperaron dentro de su casa para amenazarla, violarla y dejarle un claro mensaje: 

"No hables nunca más, mira lo que te pasa por hablar, sabemos que trabajas en los derechos humanos, no te vinimos a robar nada. No vinimos a robarte nada, a mí me pagan para esto". 

Además, le dejaron un graffiti con las letras VLLC que representan un slogan mediático del presidente Javier Milei, "Viva La Libertad Carajo".

Estamos confundiendo democracia formal con democracia real

La democracia formal hace a la existencia de los tres poderes, pero la democracia real, es aquella que como dice la palabra es el gobierno del pueblo. Eso no está existiendo, pero hay que reconocer, que fue lo que la gente eligió.

Les quiero dar un dato, a 48 años del golpe, la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad actualizó los números de los juicios:

► 661 genocidas detenidos, condenados o con preventiva. 

Más del 75% tiene beneficio de arresto domiciliario, pero desde el gobierno de Macri este porcentaje bajo por el número de fallecidos. Desde el 2006 hay 1.176 condenados, se dictaron 321 sentencias de la cuales "solo un tercio está firme",  286 causas todavía están en instrucción - 42% - además, hay 1.491 genocidas  libres y 26 prófugos.

Como si fuera una ratificación del sentido de nuestro gobierno en cuanto a la vigencia de los DDHH nuestra nunca bien ponderada Patricia Bullrich, denunció al secretario de DDHH Horacio Pietragalla Corti por traición a la patria ya que este responsabilizó al estado por la desaparición y muerte de Santiago Maldonado.

Este es el respeto que tiene nuestra ministra de seguridad del estado por aquellos que defienden los derechos humanos. Que no nos parezca poco esta acción.

Veo necesario reiterar que el objetivo del golpe militar del 24 de marzo del 76 fue desaparecer del país la posibilidad de un desarrollo soberano.

Quiero finalizar esta editorial con un fragmento del alegato de Juan Carlos Pumilla "Pinky" en el juicio Subzona 1.4 III por la represión de La Pampa, quien fuera distinguido como "Maestro del Pueblo". Un militante por la Memoria, la Verdad y la Justicia secuestrado durante la última dictadura cívico militar.

Texto de uno de los poemas de la poeta española Marisa Peña


La sombra de la memoria también es alargada, se refiere a esa memoria que nos identifica y que nos representa. La memoria de la cuál extraemos sus contenidos emancipadores y la memoria sin la cual no existe el acto de justicia, la memoria como redentora de la historia, porque, además, la desmemoria sumada a la impunidad ha sido el caldo de cultivo de las grandes atrocidades del pasado.

Elijamos un límite temporal donde serán nombres y apellidos prototípicos, desde Joaquín Penina a Rafael Nahuel, desde Felipe Vallese a Santiago Maldonado, pasando por ese horror de la historia nacional que es el bombardeo a Plaza de Mayo, cuya impunidad fue consagrada por el célebre abrazo del almirante Rojas con el ex presidente Carlos Saúl Menen.

Podemos hablar de la memoria desde otro ángulo, tal como nos enseñó nuestro maestro y amigo Ricardo Nervi al regreso de su exilio en México.

Contaba Ricardo, a cerca de una ceremonia que cultivan culturas ceramistas de América Central. El alfarero maestro anciano al que ya no le dan las fuerzas para alzar una pieza, decide delegar su tarea y elige el jarrón mejor gruñido, el más sonoro, el mejor templado y se lo entrega al que va a ser su sucesor. El que lo recibe no lo guarda en un estante, lo arroja al suelo y se muelen los fragmentos. Es con esos restos que realiza la argamasa con la que levanta una nueva pieza.

Esa es la memoria que nos gusta, la que sirve para construir cosas nuevas, en esa memoria nos refugiamos, con esa memoria nos defendemos, con esa memoria avanzamos al porvenir para poder establecer cuál será la longitud de la sombra de la justicia.

N D R

Como sabemos que este proyecto es leído no solo en toda América, sino, también en Europa, queremos que este maravilloso cuento lleno de colores llegue a todos ustes..

"Las brujas, los monstruos y los colores" 

"Cuentan los que saben las historias prohibidas que hace mucho tiempo, pero no tanto, los monstruos decidieron comerse todos los colores.

Se pusieron caretas de buena gente, y así empezaron a circular entre los habitantes, contando historias terroríficas sobre lo peligroso que eran los colores y quienes los usaban, lo mal que hacía cantar en las plazas, leer en los parques, bailar en las escuelas y regar las ideas con agua de lluvia.

Muchos les creyeron, y los monstruos aprovecharon para pedirles que dijeran los nombres de aquellos vecinos que más alto cantaban, más colorido pintaban, más ideas enseñaban y más libros leían, es decir, los que más colores tenían en sus casas y sus almas.

Entonces, una noche, los monstruos llegaron a esas casas, escuelas y plazas, donde vivían los que habían sido denunciados, y se los llevaron. Mucha gente los vio, pero pocos dijeron algo: algunos por miedo, otros porque estaban de acuerdo con los monstruos, y otros, simplemente, porque estaban ocupados en otras cosas, y les parecía que todo ese lío no tenía nada, nada que ver con ellos.

Así, de a poco, los monstruos iban devorando uno a uno todos los colores de ese reino: se comieron el verde esperanza, el azul emoción, el rojo apasionado, el anaranjado de las ideas, el turquesa de la imaginación, el amarillo de las carcajadas y el rosa chicle de las sonrisas.

Triste, triste se volvió el reino, sin cantos, ni risas ni colores. Los monstruos se llevaban a los colores y a las semillas de esos colores, porque sabían que, si cortás un árbol, pero dejás las semillas, ese árbol vuelve a crecer más alto, más fuerte y más verde que nunca. Los colores que se llevaban los monstruos desaparecían, y casi nadie preguntaba por ellos. Solo quedaban los grises, cada vez más grises, más quietos y callados, detrás de ventanas cerradas.

Casi, porque entonces se alzaron las Brujas Blancas. Ellas empezaron a preguntar por los colores, los buscaron en cada rincón, detrás de los muros y dentro de los pozos. Caminaron incansablemente, y hasta enfrentaron a los monstruos, preguntando adónde se habían llevado a los colores.

Al principio ellos no les prestaron atención, después trataron de asustarlas, hasta que se dieron cuenta de que no tenían miedo, luego intentaron comérselas, pero cada vez que lograban comer a una, aparecían más.Las Brujas Blancas querían los colores de vuelta, y no estaban dispuestas a detenerse.

Los monstruos empezaron a retroceder, los habitantes del reino empezaron a despertar del miedo, los cómplices de los monstruos intentaron inventar historias de brujas malas, pero casi nadie las creyó.Pero no fue así. Las Brujas Blancas continuaron revisando cada piedra, cada muro, cada pozo, cada río, cada monte, en busca de los colores, porque sabían que, en algún lado, los monstruos los habían escondido, los habían engañado, haciéndoles creer que eran monstruos ellos también, que siempre habían sido monstruos, que su destino único, era ser monstruos y no colores.

Y un día los monstruos se retiraron. Algunos fueron hechos prisioneros, otros escaparon, con su careta de buena gente, algunos más se murieron, y la gente creyó que las Brujas Blancas se detendrían en su búsqueda, porque había pasado mucho tiempo, y quizás los colores ya se habían despintado.

Y entonces, una mañana, empezó a suceder: encontraron un color, un violeta intenso, que había sido formado por la pasión del rojo y la esperanza del azul, y se parecía un poco a ambos, según donde le diera la luz. Y después encontraron una carcajada amarilla, una esperanza verde, un gesto magenta, unos ojos marrones, unas trenzas coloradas y unos rulos chocolate...

Y aún ahora siguen los monstruos odiándolas y ellas derrotándolos. Y aún ahora siguen los amigos de los monstruos diciendo que los colores no existen. 

Y aún ahora siguen las Brujas Blancas buscando y encontrando colores.

Cecilia Solá 

Fotos: Silvana Lazzarín

Programa N° 176, emitido el 29/3