APROPIARSE DEL TERRITORIO Y VER QUE CRECE BAJO NUESTROS PIES

17.12.2023

Durante la participación de un curso denominado "Monte Encuentro" realizado en la localidad de San Nicolás, nuestras "yuyeras" han entrevistado al comunicador ambiental Maximiliano Leo Schulz, que de manera clara y sustancial nos entreabre una puerta con la intención de "pinchar la burbuja de los algoritmos" y así poder sumergirnos en una profunda reflexión que nos anime a provocar un cambio profundo en nuestra relación con el Territorio.


Por Estela Casado y Mirtha Susana Rodríguez


HAV: 

¿De qué tratan estos cursos?


MS: 

Me dedico a construir territorio, agarro grupos de personas y las arrojo a la intemperie, salimos a lugares incómodos, la naturaleza no es un lugar cómodo para quedarse así como ir al shopping, al Club y otros lugares. La naturaleza es un lugar donde hace calor, hay viento, frío, mosquitos, a veces llueve; yo me dedico a mostrar lo cotidiano, lo que podes encontrar en todos lados, en el patio de tu casa, en lo que nace de una maceta y ver esas cosas que acompañaron al ser humano por milenios, porque por algo están cerca nuestro, estuvieron siempre cerca del ser humano.

En esos lugares hay pequeños tesoros que son medicina, alimento, polinizadores para las mariposas, que dan fruto para los pájaros, que tienen raíces dulces que alimentan a otras plantas y contemplar como podemos vincularnos con lo cotidiano, con el suelo que pisamos y escondemos con baldosas o cemento, ahí abajo, está la madre tierra y cuando nos vinculamos con ella lo que te pasa es que comenzas a estar como todo lo que le pertenece a la naturaleza; si miramos un árbol que está sano es porque está bien, en su entorno, si miramos un cardenal, una calandria, un gato montés, un carpincho está todo bien, en la naturaleza no hay cosas enfermas, solo andan enfermos, los que le cedieron la alimentación a la industria, los seres humanos, los gatitos que comen balanceado, las vacas que están en el feedlot comiendo cereales. En la naturaleza todo está como debería estar.

Entonces, cuando uno se empieza a vincular con ella de un modo un poquito más allá de lo contemplativo, nutriéndonos de lo que nos brinda como lo hacen el resto de las especies que la habitan, te pones igual que la naturaleza, ¿Por qué deberías estar de otra manera si somos uno más de los bichitos que la habitan? 


HAV: 

Queríamos preguntarte además, cuántos años hace que te dedicas a esto, cuánto tiempo te llevo  elaborar el libro que escribiste y que se llama: AMBIENTES Y PLANTAS DEL RIO PARANA Y SUS TRIBUTARIOS CONTINENTALES.


MS: 

Yo ando en la tierra desde siempre, de muy chiquito, me crie en la ciudad de Rosario y la naturaleza, está en todos lados, no es que tenes que criarte en el campo, en la montaña o en la isla. Una baldosa se levanta un poquito y sale un bosque de abajo, sale un Palán-Palán que te destruye una casa entera, te levanta la casa como un monstruo, en cambio, a la plantita de vivero tenes que regarla, hablarle, ponerle musiquita…en la naturaleza es al contrario, todo tiene una energía.

Yo tenía mucho tiempo  para estar en el patio, para jugar  en la casa de algún amigo; mi papá me dedicaba mucho tiempo para caminar ya que a él le gustaba hacerlo y caminábamos por las vías del tren en Rosario, por el campo, él hacía aeromodelismo y volaba en un campito, entonces yo, tenía mucho tiempo para andar por un arroyo que se llama Ludueña.

Tengo familia en Córdoba e íbamos mucho tiempo allá y, en el solar de los Videla que vivián al lado de mis familiares que eran bastante montaraces y con los que yo pasaba mucho tiempo, nos mandaban a juntar yuyos, o a buscar agua del algún aljibe en especial. Libertad, digamos, lo único que escuchaba era el grito de mi mamá a lo lejos …."¡A comer!" y después, a seguir jugando, sin tv.


HAV: 

¿Por qué te dedicaste a investigar los humedales?


MS: 

Porque los humedales eran la naturaleza más cercana que tenía donde vivía, porque era lo que estaba más a mano, si me hubiera criado en otro lado me hubiera dedicado más a La Pampa, al bosque chaqueño, era lo que tenía enfrente, salía a mi barrio y vivía a 10 cuadras del río. Miraba al fondo de la calle, se terminaba la ciudad y empezaban los humedales. Por una cuestión de comodidad y cercanía, siempre aprendo lo que tengo al lado, no me da para aprender cosas de la selva misionera, o de la Patagonia. No soy lo suficientemente inteligente como para retener, entonces aprendo de lo que tengo y de lo que puedo ver, soy muy limitado en la capacidad de aprender cosas, sólo aprendo lo que tengo alrededor.


HAV: 

Con respecto a los humedales, ayer, en parte del curso que nos estás dando, nos hablabas de la problemática de cómo fue ganando esos espacios la agricultura y la ganadería y también, de la lucha que todavía nos debemos los argentinos para que salga de una buena vez, una ley cajoneada desde hace mucho.


MS: 

Primero tenemos que saber que son humedales, porque en un manual de escuela, humedales no existe. En los humedales hay ambientes aéreos, acuáticos, terrestres, el humedal no es un ambiente en transición, es un ecosistema puro, no es una transición entre una tierra seca y un lugar húmedo, entonces primero, hay que saber definirlo. Son los lugares en donde mas gente vive en el mundo, la mayor parte de la gente vive al lado de humedales porque de ahí, obtiene agua.

Nosotros estamos hechos de agua, no somos como una llama que puede estar sin este elemento un montón de días, necesitamos mucha agua todos los días, por esta razón, los seres humanos se fueron asentando desde su nacimiento al lado del agua, siempre, es más, cuando el ser humano se alejó un poco del agua tuvo que dedicarse un poco a la agricultura y las civilizaciones y ciudades debieron  pensar cómo llevar agua hacia esos lugares específicos.

El ser humano "es un animal de estar al lado del agua", es como el carpincho que si no está al lado del agua, no es, el humano es lo mismo sin embargo, lo sacaron del agua y lo empezaron a llevar por las vías del tren.

Los humedales son estos ambientes donde hay agua y donde todas las raíces de las plantas están acostumbradas a vivir un tiempo sin oxígeno, inundadas, eso es un humedal, un ambiente donde hay agua a veces, todo el tiempo en donde todas las plantas puedan resistir inundadas por un tiempo. Por lo tanto un humedal son las islas del Paraná, los bordecitos del arroyo donde anduvimos, las lagunas, donde están las totoras, juncos, camalotes, la costa del mar, los primeros metros de la costa del mar donde todavía hay plantas arraigadas, ya después de los 6 o 7 metros, no hay plantas porque la luz no llega para hacer fotosíntesis y entonces ya no se los considera humedales.

Los salares son grandes humedales porque crecen plantas como el cachiyuyo, jume que resisten estar inundadas, ya que los salares aunque estén en medio de desiertos, la sal junta humedad; entonces, toda la humedad de ese entorno está abajo, en los acuíferos.

Estos espacios tienen mucho interés productivo, por lo tanto, pedirle al gobierno que los cuide es como atentar contra los compromisos extractivistas que tienen con otros países. 

Estos días, estuvo llamando el dueño de Tesla al Presidente que asumió. ¿Qué hay detrás de ese llamado?..."A el litio dámelo a mí, no se los des a los chinos, yo soy el que fabrica autos eléctricos". Entonces una ley de humedales, sería defender una mina de dólares donde tanto los empresarios como los políticos se están baboseando para quedarse con "esa caja". Obvio que no hay interés del sector político por defenderlos, conformémonos con que hagan pequeñas reservas alrededor de los salares, en un rinconcito y no mucho más que eso.


HAV: 

Tampoco hay mucho interés en sacar la ley porque eso obviamente va a frenar todo este tipo de negocios.


MS: 

Sí es así, en lugar de hacer una ley, harán un Parque Nacional en algún lugar del río, o una reserva en algún pastizal donde haya lagunas, es decir, pequeñas cosas que les van a dar a esas comunidades en donde haya gente ambientalista levantándose y con eso los conformaran, pero la Ley como se hubiera querido, con asignación de presupuesto para conservarlos no va a salir, así como quieren los colectivos ambientalistas.


HAV: 

¿Qué pasa en esta zona del litoral con las comunidades aborígenes respecto de todo esto? Porque ellos también están siendo desplazados en las distintas partes del país por estas políticas extractivistas, como podemos verlo de Norte a Sur. ¿Cuál es el panorama en esta zona?


MS: 

En esta zona tenemos comunidades originarias, auto percibidos indígenas y luchando por su territorio:

  • En el humedal de Melincué, cerca de San Nicolás de los Arroyos hacia el oeste y resistiendo la defensa de la tierra a la comunidad mocovíes . 
  • En la zona de Gaboto, la comunidad chaná.
  • Más al norte en Coronda una parte de la nación chaná. 
  • En la ciudad de Rosario hay muchísima migración de la nación qom principalmente, y también otras etnias.

La voz de todos ellos no existe, ni siquiera la gente de Santa Fe sabe que esas personas viven acá, digamos que está prohibido darles un micrófono, simplemente hay grupos que los organizan como la corriente clasista combativa (CCC) y cada tanto, salen a pedir algo porque viven con indigencia extrema y no más que eso. Nunca van a ver que un periodista le ofrezca un micrófono y le pregunten "¿Ud. que siente? ¿Ser indígena y que le hayan sacado su monte y que lo destruyan, teniendo que venir a vivir a una Villa Miseria? ¿Está contento con la basura y el cartón que pueda juntar acá en nuestra hermosa ciudad?". Así es como piensan los blancos de la ciudad de Rosario donde están la mayoría de los qom. No tienen voz y tampoco son fuertes en la organización, hay algunos pero muy sectoriales para tener un poco más de dignidad en los barrios donde viven hacinados. No hay un alma indigenista que esté convocando. Hace poco pasó el Malón de la Paz rumbo a Buenos Aires y ni siquiera fueron a acompañarlos, están atomizados.

Esa es una gran victoria del Estado Nacional en haberlos separado, alejado, cortando la comunicación entre ellos. Hay lugares en donde por ejemplo las comunidades indígenas están más organizadas, mucho más fuertes, como en el sur es la nación mapuche y sin embargo son estigmatizados por la gente del lugar  que les dice que "son chilenos", es un desprecio total. Los guaraníes en cambio, "son buenos"... mientras vivan en aldeítas, encerraditos, ahora, si los mapuches dicen "quiero mi tierra , mis ancestros vivían aquí", en donde hay una cabaña, un loch para turistas construido sobre un cementerio de sus ancestros, ahí la cosa cambia, dicen que son gente que ataca la propiedad privada y hay que combatirla.

El estado se fundó bajo un genocidio contra su propio pueblo indígena en 1880, durante el gobierno de Roca reivindicado ahora por los liberales, la gente estaba contenta mientras lo teníamos en el billete de $100, porque Roca era liberal. La postura que tenemos los ambientalistas sociales es siempre estar del lado de los derrotados. Hace 500 años que somos una colonia, puede ser que nos falten otros 500 años  más, pero siempre debemos estar del lado de la lucha, de la posteridad y seguir en el tiempo con la resistencia.


HAV: 

El originario siempre defendió la tierra, el lugar en donde vivió y la sigue defendiendo a ultranza mientras el resto de los ciudadanos que nos creemos más civilizados ni siquiera vemos y apoyamos este tipo de situaciones.                                                                                                                                                    Para ir redondeando esta entrevista quisiéramos que promociones tu libro, muy bien hecho y que te costó mucho hacerlo.


MS: 

En realidad yo no promociono mi libro, el libro es una excusa para entrar a otro lugar y conocer gente, para romper la burbuja de los algoritmos, es una herramienta que tiene filo entonces rompe la burbuja y puedo saltar a otro lado. Estoy muy contento con el libro, me sirve, es una espiga que pincha esas burbujas y me permite llegar a otro lugar, por eso no hablo de él.

En el litoral la gente no habla de sí misma, en esta región vivimos la cultura del "andar", no la cultura del "ser", lo que hacemos lo hacemos para terminar algo y lo dejamos. Cuando uno llega a un lugar, ya está y si alguien llegó al lado tuyo hay que correrse porque ya llegaron otros. El libro no es el principio de algo sino, "bueno, al fin lo pude terminar, respiro, me libero, ahora tengo una espina para entrar".

Lo que intento hacer con él, es generar la apropiación por el territorio que es grande, toda la primer parte, habla de lo lindo que es poder vivir en este hermoso rinconcito del litoral, el libro se ubica aquí, en la provincia de Santa Fe que está considerada por todo el mundo y por los propios santafecinos, como una provincia productiva. Acá el santafecino que quiere disfrutar de la naturaleza se va a Entre Ríos, a las Termas, a Córdoba, a las montañas, a Buenos Aires, al mar o al Chaco, al impenetrable; buscan la naturaleza en otro lado, no lo hacen en su propio lugar.

Lo que hice fue encontrar la naturaleza en los lugares más hermosos de mi casa, en la comodidad de lo que puedo ver alargando la mirada, traté de mostrar lo hermoso que es vivir donde te tocó nacer. La segunda es un catálogo de plantas, porque hay muchísimas en el litoral, comestibles y medicinales. El libro es un compendio que te ayuda con la fotografía a caminar y chequear las plantas y además, tiene referencias de donde te resulta más fácil encontrarlas, si es en una laguna, o en una isla, etc.

Es un libro que por un lado te aquerencia, y por el otro, te invita a salir, que es lo que a mí me gusta, sacar gente a la intemperie...como digo: "Salgo a pastar personas, porque visualizamos y probamos".  A  identificar lo que crece bajo tus pies, porque ahora ustedes van a llegar a su ciudad, barrio, patio y en los lugares donde vayan, van a encontrar plantas diferentes, porque van a estar con la vista afinada a otras cosas, y eso, es CONSTRUIR SOBERANIA ALIMENTARIA, es así como se hace, como dice el dicho litoraleño: el río nos cría y el remanso nos amontona 

Programa Nº 161, emitido el 15/12