QUIERO UNA DEMOCRACIA DE RESULTADOS

Por Juan Alberto Rambaldo:

Desde hace tiempo vienen apareciendo cada vez  más elementos que complican la imagen de personas que están incluidas dentro de las estructuras de los poderes del estado.

Venían anunciando la posibilidad de que a Cristina Fernández le cayera una condena de prisión, también, veníamos escuchando la respuesta de organizaciones sociales y sindicales, que decían que no la iban a aceptar, independientemente de los recursos legales que pudiera tener Cristina Fernández para hacer su defensa.

ATE -Asociación de Trabajadores del Estado-dijo que iba a parar a todo el país, es decir, que hay respuesta más allá de las institucionales, que demuestran que todas estas cosas que están pasando hoy ya venían siendo masticadas con anticipación.

Yo no voy a salir a defender ni a uno, ni a otro, porque no me corresponde, además, aún no se, los fundamentos del fallo, si bien, el proceso tuvo deficiencias grosas. Esto no quiere decir que el fallo sea bueno, malo o regular, pero están sacando a la luz, también en este tiempo, actitudes contubernistas de órganos periodísticos, integrantes del poder judicial y del poder administrativo, e integrantes de los poderes de estados provinciales y municipales vinculados a un sujeto del cual, nosotros hemos despotricado en forma constante como es Lewis.

Evidentemente está aflorando un olor a bosta tremendo, yo no sé si las cosas están dimensionadas correctamente, si están superlativizadas o minimizadas, pero lo cierto es, que los pobres argentinos estamos viviendo conflictos de poderes que no sabemos a dónde puedan llegar.

Yo lo que creo es que, si esos chats son ciertos, y parecería que sí lo son, porque hasta el momento, el único cuestionamiento que han hecho es sobre la forma ilegal en que fueron obtenidos, y no porque no sean ciertos; y si son ciertos, están comprometidos funcionarios de muy alto rango. 

Esto nos envuelve a todos los argentinos en un estado de inseguridad, no pudiendo confiar en nada, porque si el poder ejecutivo es violatorio de la ley, si el poder legislativo no es confiable y tampoco lo es el poder judicial, no estamos en un estado de derecho. 

Estamos en un caos, yo no estoy seguro de nada, tampoco me siento representado por este gobierno, y obviamente, mucho menos representado por el gobierno anterior. Justamente, no me siento representado por las cosas que hemos estado diciendo en este programa:

• Los puertos no son nacionales, sino privados
• Las comunicaciones son privadas y no nacionales
• Las empresas casi todas, están cooptadas por capitales extranjeros
• Del sur, son dueños los árabes, los ingleses, los italianos, los chinos, los canadienses, y todo el popurrí que imaginen, lo que nos hace llegar a la conclusión de que no somos soberanos. 

Por estas razones, no me siento representado por este gobierno del que querría que tomara actitudes que signifiquen la defensa de la soberanía nacional, la defensa de los intereses populares y del estado de derecho.

Un estado de derecho real, y no el visto desde el punto de vista de la legitimidad burguesa.

Una cosa es que estén los tres poderes, Ejecutivo, Legislativo y Judicial, y otra cosa, es que eso sea un gobierno que representa al pueblo, porque la democracia burguesa, esa que cree que hay democracia porque hay partidos políticos, porque hay cámara de senadores, a mí, no me basta. Lo que me basta es la realidad.

Hubo un presidente argentino que no voy a decir quién es, que dijo: 

"Hay democracias de medios y democracias de resultados". 

Estoy harto de la Democracia de Medios, quiero una Democracia de Resultados.

Programa N° 113, emitido el 7/12