Afganistán: las cicatrices de la pobreza

12.12.2021

En Afganistán la pobreza deja una fea cicatriz en el costado de cientos de personas cuya única posesión valiosa se halla en el interior de su cuerpo: sus riñones. Y muchos no dudan en venderla para alimentar a su familia o saldar deudas. La provincia de Herat se ha convertido en una meca para enfermos de todo el mundo, en especial occidentales. No hay más que acudir a ciertos hospitales con una buena suma de dinero; la miseria y un equipo de médicos sin escrúpulos se ocupan de todo lo demás.